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Josmar. Enviado Especial a Belmez de la Moraleda (Jaén)

Se que estáis flipando pepinillos tras leer el titular y ver la foto con el gepeto del titán Antonio Genil en la parte inferior izquierda, pero antes de contaros el sorprendente suceso he de contextualizar la aparición paranormal del rostro del primer reportero muerto del blog. En el verano de 1971, en un hogar humilde del pequeño pueblo de Bélmez de la Moraleda, provincia de Jaén aparece una mancha en el suelo que pronto adquiere los rasgos de un rostro humano. La familia que habita la casa decide extraer el trozo de suelo con la cara y lo conservan enmarcado a modo de chascarrillo, con el objetivo de vacilar a los desidiosos vecinos del pequeño pueblo andaluz. A partir de aquí la familia notifica el suceso e intentan darle una explicación. Para ello excavan el subsuelo de su casa pero no hallan nada; únicamente huesos, procedentes de un cementerio del Siglo XVIII (por el culo te la entocho). Poco tiempo después, un grupo de reputados parapsicólogos decide instalarse en el pueblo jienense e investigar el fenómeno de las caras. El equipo graba varias psicofonías dentro de la casa y obtiene resultados escalofriantes. Se oyen gritos, quejidos, llantos y algunas de las voces que se escuchan dicen cosas como: ¿Pero qué invento es esto?, ¿A qué jugamos?, este cura no es mi padre, viva Pepe Carrol y otra serie de fragmentos que evitaremos reproducir por su extrema grosería.
La HERPE (Hasociación Española de Rarezas Paranormales y Extrañas) llevaba tiempo tratando de aportar luz a este insondable misterio, hasta ayer mismo, cuando para regocijo de los redactores del blog, saltó la liebre, en una pared de la casa se perfiló la cara de nuestro ex-compañero asesinado en Irak, Antonio Senil.
Fernando Bramajes, la persona que dio la voz de alarma, afirmaba cariacontecido que al entrar en la casa escuchó una estremecedora psicofonía que reproducimos íntegra a continuación: "He venido a hacer unos macarrones a mi amigo Michael Jackson y a ajustar cuentas con Merino, cabeza buque, hijo puta y asesino".
El ambiente en la redacción del blog es de suma perplejidad, entre otras cosas porque ayer salimos al Bérlin, nos enchufamos y hoy no sabemos ni por donde nos vienen las ostias, eso si, una cosa hemos de decir: "Toni, te queremos y siempre estarás en nuestro cozarón".